jueves, 14 de julio de 2011

Mi nuevo mar.

Me ahogo y no sé nadar en estas aguas. Tengo un nudo terrible en el alma. Me enredan los sentimientos y no estás aquí para sacarme de esas redes. Quiero romperlas, pero temo que me rompan primero, por eso las dejo tal como están… por temor, por el estúpido temor que me encierra en un sublime baúl de recuerdos. Me abren el pecho.
Sí, es cierto, no tuviste la culpa de que los continentes se separaran, pero ahora me dan unas ganas terribles de encontrar al impetuoso que tuvo la “brillantísima” idea para meterlo en esta carne, en estos huesos y en este sentir tan agobiante. Creo que solo así se dará cuenta de que no fue menester proceder de esa manera. ¿Para qué? ¿Por qué lo hizo? Te necesito en estos momentos, pero estas tan lejos...  Necesito tus frases jocosas, quiero reír y no me sale.
Creo que dejaron de brillar mis ojos, ya no se sorprenden; solo contemplan y es triste. Se me abre el pecho y no tengo quien me de las puntadas que necesito.  Se suponía que vida no fuese proposición y juicio.

lunes, 4 de julio de 2011

Nuestro fin último – la felicidad-


Tras la felicidad estamos muchos, pero hacemos poco para llegar a ella. Los prejuicios “morales” no nos dejan; según ellos, debemos de pensar en nuestro futuro, en  nuestra sociedad, en nuestro entorno, en fin, en el famoso prójimo que nunca nos tiene en cuenta. Que fastidio vivir para y por lo demás. Me hace preguntar, y yo ¿dónde quedo entonces? Mi felicidad ¿Quién la procurará?
Nuestro fin, el de cada ser humano es ser FELIZ. Ser el reflejo de la felicidad en nuestros actos, sentirnos bien en lo que hacemos y cómo lo hacemos. No importa lo que tengas que hacer para llegar a ella –siempre y cuando no afectes a terceros- pero, qué rico se siente saber que vas tras ella, tropezar, y que esos tropiezos duelan, duelan mucho para poder sacudir ese polvo, ese estúpido lodo que insiste en quedarse en nuestro indumento para recordar lo difícil que fue levantarse. Es de sumo placer poder lavarlo, reflexionar y luego reír, reír, hacerlo a carcajadas. Incluso si fue un corto momento, cortito de felicidad. Recuerda ese momento, guárdalo tal cual, insiste en buscar más. Nunca te canses, es la única razón por la cual nos permiten esta pequeña estadía a la que llaman vida, dentro de un mundo lleno de sensaciones que te esperan para ser vividas. Eres el encargado de no dejarlas, de quedarte sin ellas, de no disfrutarlas.
Vive, siente y por favor ríe, ríe siempre.

jueves, 5 de mayo de 2011

¡Tu Sancho siempre Quijote!

Cree este Blogg por una terrible necesidad de escribir, denunciar y por que no, olvidarme de los estúpidos y molestos prejuicios sociales que tanto nos atascan en la vida (tengo el maestro predilecto para esto). Mas esta no fue mi principal razón; Mi Joey, la mujer que amo y estaré eternamente enamorada para toda mi vida (pase lo que pase princesa :p) fue mi principal razón. Sip! Ella, la misma que viste y calza, -la eterna enamorada de la trova necesitaba seguidores (shhh no le digan por favor ijijijiji)- así que, así fue y aquí estoy :D apoyándola como siempre!
¡Tu Sancho siempre Quijote!